Doña Perfecta eBook

This eBook from the Gutenberg Project consists of approximately 512 pages of information about Doña Perfecta.

Doña Perfecta eBook

This eBook from the Gutenberg Project consists of approximately 512 pages of information about Doña Perfecta.

4

II

=Un viaje por el corazon de Espana=

Cuando empezada la caminata dejaron a un lado las
casuchas de Villahorrenda, el caballero, que era joven y de
muy buen ver, hablo de este modo: 

—­Digame usted, Sr.  Solon...

[5] —­Licurgo, para servir a usted...

—­Eso es, Sr.  Licurgo.  Bien decia yo que era usted un sabio legislador de la antigueedad.  Perdone usted la equivocacion.  Pero vamos al caso.  Digame usted, ?como esta mi senora tia?

[10] —­Siempre tan guapa—­repuso el labriego, adelantando
     algunos pasos su caballeria.—­Parece que no pasan anos
     por la senora dona Perfecta.  Bien dicen que al bueno
     Dios le da larga vida.  Asi viviera mil anos ese angel del
     Senor.  Si las bendiciones que le echan en la tierra fueran
[15] plumas, la senora no necesitaria mas alas para subir al cielo.

     —?Y mi prima la senorita Rosario?

     —­iBien haya quien a los suyos parece!—­dijo el aldeano.

     —?Que he de decirle de dona Rosarito, sino que es el vivo
     retrato de su madre?  Buena prenda se lleva usted, caballero
[20] D. Jose, si es verdad, como dicen, que ha venido para
     casarse con ella.  Tal para cual, y la nina no tiene tampoco
     por que quejarse.  Poco va de Pedro a Pedro.

     —?Y el Sr.  D. Cayetano?

     —­Siempre metidillo en la faena de sus libros.  Tiene
[25] una biblioteca mas grande que la catedral, y tambien escarba
     la tierra para buscar piedras llenas de unos demonches de
     garabatos que dicen escribieron los moros.

     —?En cuanto tiempo llegaremos a Orbajosa?

     —­A las nueve, si Dios quiere.  Poco contenta se va a
[30] poner la senora cuando vea a su sobrino....  Y la senorita 5
     Rosarito que estaba ayer disponiendo el cuarto en que usted
     ha de vivir....  Como no le han visto nunca, la madre y la
     hija estan que no viven, pensando en como sera o como no
     sera este Sr.  D. Jose.  Ya llego el tiempo de que callen
[5] cartas y hablen barbas.  La prima vera al primo y todo
     sera fiesta y gloria.  Amanecera Dios y medraremos, como
     dijo el otro.

     —­Como mi tia y mi prima no me conocen todavia—­dijo
     sonriendo el caballero,—­no es prudente hacer proyectos.

[10] —­Verdad es; por eso se dijo que uno piensa el bayo y
     otro el que lo ensilla—­repuso el labriego.—­Pero la cara
     no engana... ique alhaja se lleva usted! iY que buen
     mozo ella!

     El caballero no oyo las ultimas palabras del tio Licurgo,
[15] porque iba distraido y algo meditabundo.  Llegaban a un
     recodo del camino, cuando el labriego, torciendo la direccion
     a las caballerias, dijo: 

     —­Ahora tenemos que echar por esta vereda.  El puente
     esta roto y no se puede vadear el rio sino por el cerrillo de
[20] los Lirios.

Copyrights
Project Gutenberg
Doña Perfecta from Project Gutenberg. Public domain.